Y como para qué?

El mensaje de la gran fuerza de México.

Jesús Valencia.

Desde hace días tiene presencia la exposición “La gran fuerza de México” en la nave Lewis del Parque Fundidora en Monterrey.

La pregunta es, en una ciudad como la que vivimos llena de delincuencia, muertes, secuestros, mantas del cartel, etc., ponemos una exposición en la que de alguna forma rindes tributo a las fuerzas que están haciendo su labor en el combate al crimen, la cual no se ve reflejada en las calles, sin embargo lo está en cada aparición a cuadro en los noticieros, en el bien hablar de los soldados, y en su aportación a la sociedad.

De una nota nada objetiva de Milenio, nuestra fuente, analizaremos cada instante que se logre captar para dar a conocer el verdadero mensaje que tiene la exposición.

 No les importa pasar más de una hora bajo el sol haciendo fila para ingresar a la Nave Lewis del Parque Fundidora a observar la exposición "La Gran Fuerza de México"… son miles de niños que tienen el deseo de observar las armas y equipos militares y platicar con los soldados pues admiran su trabajo.

En una sociedad como la regiomontana estar en todo el calor que se siente en esta ciudad, los niños NO están contentos de estar en las filas rumbo a una exposición, las escuelas promueven el hecho de ir debido a que los mandatos del Gobierno así lo exigen. Por eso la mayoría de los niños acuden a la exposición sin ser acompañados de sus padres, son grupos de alumnos que son llevados a observarla.

Ahora en la nota se dice que los niños van y platican con los militares pues admiran su trabajo, punto “clave del mensaje”, la admiración parte de las teorías de la comunicación de masas, explicado de la siguiente forma:

La teoría del aprendizaje social promueve: Si las personas ven consecuencias deseables y positivas en la conducta observada, es más probable que la imiten, tomen como modelo y adopten.

Es decir si los niños de 9 a 13 años comienzan a “admirar” la labor de los soldados, ellos van a querer adoptar como modelo su estilo de vida, hace años nosotros queríamos ser bomberos, policías, adoptábamos modelos que nos daban los juegos como policías y ladrones.

Lo que acabamos de explicar viene dicho en el segundo párrafo de la nota: Este domingo al medio día la cuenta de visitas iba en siete mil. En su mayoría niños vestidos con ropa camuflada, imitando a los que consideran sus héroes del momento.

En los primeros tres días que tiene la exposición son cientos de familias las que se han acercado al módulo de información para conocer los requisitos de ingreso al Ejército Mexicano, esto es una satisfacción extra para los soldados, dice el Mayor Gabriel García.

Si llevamos a nuestros hijos a la exposición, preguntamos por los requisitos, si es una satisfacción, lo es para saber que se cuenta con niños que quieren ser soldados, se cuenta con la mente positiva de observarlos en los combates, se habla de los héroes, los que nos protegen, ver sus armas sus carros, tanques, helicópteros, para que cuando pasemos de una exposición a una guerra, sepamos que son y para qué se utilizan, le quitamos el miedo a los niños por la admiración, le damos a los padres un alivio en vez de una preocupación.

En un comunicado de prensa, la Sedena afirmó que uno de los objetivos de la exposición es "fortalecer los vínculos entre la sociedad y el Ejército y la Fuerza Armada mexicanos…" a través de la convivencia entre soldados quienes asisten al lugar.

De hecho no nos han mentido, la gran fuerza de México tiene el objetivo bien planteado, estructurar una línea de convivencia entre los soldados y la sociedad, hacer que el ejército se llene de reconocimiento, no solo como premio, sino un reconocimiento facial, que sonaría de la siguiente manera: “nosotros somos el ejército, vestimos de tal forma, usamos estas pistolas, hoy estamos en una exposición, mañana en tu ciudad, pasado en tu colonia, día tras día en tus calles hasta llegar a las puertas de tu casa”.

“Mamá yo quiero ser soldado”, son las frases que se buscan con la creación de la exposición, no hay un mensaje oculto, se ha dicho, visto en “La crónica de hoy”, Busca tres objetivos: promover la convivencia entre militares y civiles, desatar la confianza y fomentar el interés, en especial de menores de edad, por ingresar a las Fuerzas Armadas.